La escasez de agua es uno de los grandes retos de la humanidad en este siglo. Según las previsiones de los modelos de cambio climático, la temperatura va aumentar y cambiarán los patrones de precipitación; la humanidad deberá adaptarse a los nuevos escenarios donde se prevé que aumente la competencia por el recurso hídrico entre el abastecimiento urbano (con alta concentración de población) y el regadío. La agricultura es la principal fuente de alimentación de 7.300 millones de personas en el mundo, además, es un sector estratégico para mantener el producto interior bruto de Argentina y España.

Por tanto, en este contexto, la planificación, la gestión, la tecnificación y la digitalización de los recursos hídricos disponibles en cada zona serán los pilares para mantener el abastecimiento de los usuarios del agua, cuidando los ecosistemas. Asimismo, se podrán evitar problemas sociales/económicos que pudieran derivarse ante la escasez del recurso y competencia entre usuarios.

 

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